Te voy a contar mi experiencia tras más de un año de uso del Netvue birfy, un comedero para aves con cámara e inteligencia artificial para reconocer las especies. Más abajo te dejo un código del 10% de descuento.
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¿Qué es el Birdfy?
Ya hice una reseña cuando me lo enviaron, puedes leerla aquí, pero te lo explico brevemente. Netvue es una marca que se dedica a construir cámaras de vigilancia basadas en la nube. Han desarrollado un sistema de Inteligencia Artificial capaz de diferenciar diferentes objetos o animales para avisarte mediante una notificación en el móvil. Con esta experiencia se han embarcado en la idea de crear un comedero de pájaros inteligente. Gracias a esta IA, cuando un pájaro se posa en tu comedero, recibes una notificación en tu teléfono y y la IA te dice de qué ave se trata.

Cosas que han mejorado
En este año de uso han mejorado bastantes cosas de las que no me gustaban. La primera, el diseño, y es que han sacado una versión construida en bambú, mucho más integrada en la naturaleza y con un diseño más atractivo. También una versión en amarillo, que aunque me sigue pareciendo fea, al menos te da más opciones. Y lo que creo que es más importante; han bajado el precio bastante y aunque sigue siendo un precio alto, ahora es mucho más atractivo. Para ahorrarte un poco más, han sacado una versión lite, que es igual, pero sin reconocimiento de especies.
También han creado un paquete con una percha más amplia donde se pueden poner más aves al mismo tiempo y colocar bebederos, además de accesorios para pinchar fruta, bolas de grasa o néctar para colibríes. Lo malo es que es un paquete que hay que comprar a parte pero creo que merece muchísimo la pena. Lo tengo desde hace unos 5 meses y estoy encantado. Puedo observar comportamientos diferentes e interacciones que con la anterior percha no podía.
Otro de los accesorios es un cubre semillas para evitar que llegue un ave gamberra y te tire todo al suelo o aparezca algún mamífero y se coma todo. Y si estás en América, puedes comprar también una extensión para colibríes.
Han ampliado el tiempo de grabación. Antes eran 10 segundos y muchas veces te quedabas a mitad de ver algo. Ahora son 20 segundos y disfrutas mucho más de las observaciones.
La mejora más importante ha sido la inteligencia artificial. Cuando lo probé acababa de ser lanzado y estaba bastante en pañales. Le costaba acertar las especies y estaba centrado en las de Norte América. Tras este año he visto un avance enorme en el reconocimiento mediante esta inteligencia artificial. Ahora acierta prácticamente todas las veces y han pasado un montón de especies diferentes por el comedero.
Cosas que no me gustan
Una de las cosas que más me molesta es que siendo una empresa con una IA tan potente, no pueda discriminar personas o coches. Solo quiero que me detecte y avise cuando hay aves, no cuando aparece alguien paseando, un coche o cuando relleno la comida o el agua.
Otra cosa que no me gusta es que si toco la notificación, no se me abre la app en ese momento justo y me toca ir, abrirla y buscar la notificación de forma manual. Hay días que tengo más de 100 notificaciones y es un poco rollo. Siguiendo con la app, a veces me da errores de descarga o de visualización y hay que intentarlo en otro momento.
Esto creo que es culpa mía por no leer bien las instrucciones, pero entendí que tenía almacenamiento ilimitado en la nube. Pues no, solo durante los últimos 90 días, así que es importante vaciar la tarjeta para no perder vídeos.
Lo que he aprendido con su uso

La limpieza del comedero es muy importante y al ser de plástico, se hace muy fácil. Es cierto que los agujeros de la base los haría más grandes o más numerosos para poder evacuar mejor el agua, aún a riesgo de perder algo de comida.
El panel solar es súper cómodo y es que te despreocupas por completo de la batería. Así no te pierdes nada mientras la estás cargando en casa.
Creo que entre 3 y 5 minutos es un tiempo perfecto para que la cámara descanse entre activación y activación. Si pones menos, tendrás cientos de notificaciones al día y no vas a poder revisarlas todas, además de que es un peñazo tener la notificación cada minuto.
La visión nocturna no es muy allá, pero si pones la opción de ver en color de noche te lo capta muy bien. Sorprendentemente bien para ser un sensor tan pequeño.
Lo que he aprendido de las aves
Durante este año han pasado 13 especies de aves, varios mamíferos y algún que otro insecto.
- Camachuelo (Pyrrhula pyrrhula)
- Carbonero común (parus major)
- Arrendajo (Garrulus glandarius)
- Herrerillo común (Cyanistes caeruleus)
- Petirrojo (Erithacus rubecula)
- Colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros)
- Mirlo común (Tordus merula)
- Chochín paleártico (Troglodytes troglodytes)
- Trepador azul (Sitta europaea)
- Carbonero palustre (Poecile palustris)
- Jilguero (Carduelis carduelis)
- Pinzón vulgar (Fringilla coelebs)
- Acentor común (Prunela modularis)
Me ha encantado poder ver el cortejo de los carboneros, o su forma de comer, cogiendo una semilla con los dedos y picándola. El poderío del arrendajo o descubrir como hay especies que han pasado semanas o meses comiendo lo que caía al suelo antes de subir al comedero. Pude ver un petirrojo con una garrapata enorme junto al ojo, a otro bañándose en el bebedero y a una familia de 5 carboneros dando buena cuenta de la fruta, el agua y las semillas al mismo tiempo. Cómo unas especies echan a otras y los hábitos gamberros de los trepadores azules y arrendajos.
He aprendido muchísimo y lo he disfrutado un montón junto con mis hijos, ya que casi todos los días les enseñaba alguno de los vídeos interesantes que captaba la cámara. Recuerdo que en la primera reseña que hice os dije que me parecía un capricho caro, pero tras un año usándolo, me ha enamorado.
Netvue Birdfy Bamboo
Esta es la versión que acaban de sacar y sinceramente, es alucinante. Me parece preciosa, un diseño muy cuidado que solventa casi todas las pegas que le ponía al primer diseño.
Primero que es de madera, en concreto de bambú. El bambú es una de las plantas con un crecimiento más rápido, por lo que es un recurso renovable. No se emplean sustancias tóxicas en su producción, es biodegradable y tiene una alta durabilidad a la intemperie. Además, es mucho más orgánico y mucho más bonito. El plástico es poco natural y los colores que tienen los comederos previos son poco acertados.
También se ha duplicado la capacidad de almacenaje de comida llegando hasta los 3 litros. Para ello cuenta con 2 recipientes separados, por lo que puedes colocar 2 tipos diferentes de alimento y así cubrir las necesidades de distintas aves al mismo tiempo. Un gran acierto desde mi punto de vista.




El suelo está hecho con una rejilla de metal, con muchos más agujeros y se retira fácilmente para poder limpiarla. Es una de las pegas que le ponía al modelo anterior y ahora queda solucionado perfectamente.
También viene con otros sistemas de soporte, como abrazaderas metálicas para poder ponerlo en barras y postes. También sirve para colocarlo en una rama y que quede así más integrado. Este nuevo sistema es de una calidad excelente y muy fácil de usar.
Terminando con las mejoras, viene con una extensión del posadero, para que quepan más aves al mismo tiempo y estén más cómodas. Algo parecido a la percha extendida de la versión anterior, pero sin accesorios.
La cámara parece igual por fuera, pero tiene algunos cambios. Esta nueva es más angular y con una profundidad de campo mayor. También veo que tiene más nitidez, aunque crea aberraciones cromáticas en según qué condiciones lumínicas. El panel solar ahora es entero negro, con un sistema de soporte de metal flexible y abrazaderas de metal. El salto en calidad es muy grande y compensa el incremento de precio respecto al Birdfy original.
La cinta para atarlo a un árbol o poste, antes era de velcro. Ahora tiene una hebilla de metal con sistema anti retorno en la que solo tienes que estirar. Tanto en calidades como en diseño, las mejoras son notables.
Lo menos bueno de la versión de bambú
Aunque el bambú es muy ligero, es más pesado que el plástico, así que el conjunto sube a 4,6 kg, frente a los 1,4 kg de la anterior versión. También es más grande y voluminoso (28x28x30 cm) y el sistema para llenar los depósitos de comida ha cambiado. Antes se echaba el tejadillo para delante y se rellenaba por atrás. Ahora se abre el tejadillo hacia un lateral, por lo que hay que tener cuidado con no golpear con nada por arriba.
Por último, no hay previsión de sacar algún bebedero, por lo que si queremos ofrecer agua a nuestros emplumados, tendremos que hacer algún invento.
Conclusiones
Cuando hice la primera reseña os dije que me parecía un capricho caro. Tras casi un año y medio de uso os digo que yo lo compraría con mi dinero. Me ha dado muchísimos buenos momentos y me ha permitido observar a las aves de una forma que nunca imaginé. Me tiene enamorado y aunque sigue siendo mucho dinero, ahora y tras todas las mejoras, creo que merece la pena. Si te interesa te dejo un código del 10% de descuento para toda la web. El código es HEYFRAY10 en la página de https://www.birdfy.com/?ref=FraySulfato