La buena gente de SunOK me ha enviado el horno solar Suntaste y te voy a contar lo que pienso de él de la forma más sincera posible. Además, si te interesa, te dejaré enlaces de compra y un código descuento.
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Cocina solar
Como ya sabrás, me gusta mucho esto de cocinar con el sol y aprovechar esa energía gratuita para guisar. Hay muchas cocinas solares diferentes y si tienes curiosidad, puedes leer mi artículo sobre «los diferentes tipos de hornos solares» pero hoy te voy a hablar de los hornos de caja, que son los que mejor se adaptan a mis necesidades. En concreto del SunOK Suntaste XL, que es el que tengo yo.
SunOK
Antes de hablaros del horno, quiero hablaros de la empresa que lo fabrica, que también es importante. SunOK es una empresa dedicada a la fabricación de cocinas solares desde 2008 que diseña y fabrica en Portugal. El horno anterior a este era el SunOK Sun Cook, un horno que tuvo una muy buena acogida y que les permitió adquirir la experiencia necesaria para crear esta versión mejorada.
Es de agradecer tener a un fabricante en el país vecino, que no solo genera riqueza de forma local, sino que ahorra muchas emisiones en el transporte. Además, la empresa ha dado un giro bastante importante hacia la sostenibilidad utilizando cuerpos de corcho para sus hornos.
Ficha técnica
Aunque yo tengo la versión XL, existe también una versión compact, que funciona igual, pero cambia en el peso y las dimensiones.
Compact | Large | |
Largo | 52 cm | 66 cm |
Ancho | 43 cm | 43 cm |
Alto (cerrado) | 32 cm | 32 cm |
Alto (abierto) | 71 cm | 71 cm |
Superficie interior | 30×36 cm | 30×50 cm |
Altura interior (min/max) | 13/17 cm | 13/17 cm |
Peso | 9,5 kg | 11,8 kg |
Como puedes ver, la versión XL es 14 cm más ancha y un par de kilos más pesada que la versión compact. Con esto conseguimos poder cocinar 2 cosas al mismo tiempo. De echo, esta versión nos trae una bandeja (31x29x5 cm) y una olla (22 cm de alto por 14 cm de diámetro) y caben perfectamente a la vez. En la compact viene solo la olla.
Construcción

Está fabricado en aglomerado de corcho y eso es una de las cosas que más me gusta. El modelo anterior tenía el cuerpo de plástico, pero han querido ser más sostenibles y han optado por utilizar el material portugués por excelencia. Por cierto, os hablo del corcho en el artículo sobre el alcornoque, por lo que no me extenderé mucho.
Solo te diré que es un excelente aislante térmico, por lo que cumple una función extraordinaria formando el cuerpo del horno e impidiendo que el calor se escape. Además es un material renovable y biodegradable, así que su construcción y deshecho tiene un impacto menor.
Tanto los perfiles como los reflectores son de aluminio, haciendo que el conjunto sea más ligero y resistente y el cristal por el que van a entrar los rayos solares es un vidrio templado de alta transmisividad. Por cierto, este cristal tiene cierta inclinación para que las gotas de condensación que se forman en el interior del horno resbalen hacia abajo cuando obtienen cierto tamaño. De esta forma evitamos tener que abrir el horno para limpiar y poder ver el interior, con el consiguiente ahorro de energía.

La otra cosa que me encanta de la construcción de este horno es la bisagra. Se puede abrir y cerrar con una mano (tirando del medio) y la puedes dejar en casi cualquier posición. Pero lo mejor de todo es que se mantiene donde la dejes aunque esté soplando un vendaval. He estado cocinando con vientos muy muy fuertes y la bisagra ni se ha meneado mientras la mesa (con el horno encima) se tambaleaba como una loca. Una verdadera pieza de ingeniería que denota el cuidado con el que se ha fabricado.
En general, tanto los materiales como la construcción son de muy buena calidad, aunque el sistema de cierre de la puerta trasera se podría mejorar. Son 2 círculos de plástico sujetos con un tirafondo y aunque no he tenido problemas en estos meses de uso, el aspecto es que no están a la altura del resto del horno.
Uso y orientación del Suntaste
Aunque pesa casi 12 kilos, su transporte es muy sencillo porque tiene un par de agarraderas a ambos lados. Ocupa bastante, pero precisamente por eso también sirve como almacenaje y yo lo tengo lleno de otras cosas. Eso sí, con cuidado de no dañar los reflectores de aluminio.
Su uso es muy sencillo, tanto que lo puede hacer cualquiera. Hay que disponer de una zona en la que tengamos sol directo, libre de sombras. Colocamos el horno orientado hacia el sol y preferiblemente sobre una mesa o una superficie elevada. Se puede poner sobre el suelo sin problemas, pero es menos cómodo y si hay alguna piedra podría rayar o agujerear el corcho. Es bastante grueso, pero mejor cuidarlo bien ya que es un material que no se lleva bien con la abrasión.
Orientación
Una ver todo dispuesto hay que orientarlo para que reciba la mayor cantidad de rayos solares posible. Para ello, abrimos la tapa (siempre tirar de la parte central para no dañar la bisagra) y la ajustamos con la inclinación deseada. Al moverla, se creará un reflejo que tendremos que ajustar para que incida dentro del horno. Con la tapa desplegada, nos toca mover el horno de tal forma que no quede ninguna sombra en los lados, sino que esté siempre detrás. Esto te lo explico mejor en el vídeo, que es más visual.
Evidentemente el sol se va moviendo y lo ideal sería orientar el horno constantemente, pero esto implicaría estar encima todo el tiempo y se perdería una de sus ventajas. Han pensado también en ello y otra cosa muy chula de este horno es que los reflectores internos son ligeramente parabólicos. Gracias a ello recogen gran cantidad de luz incluso si la orientación no es perfecta.
En verano hay tanta energía procedente del sol que puedes cocinar orientando el horno hacia el mediodía. Lo dejas por la mañana y a la hora de comer tienes el plato listo. En invierno hay que estar un poco más pendiente.
Cómo se cocina con este horno

Una vez que lo tenemos orientado hay que precalentarlo. Bastará con unos 20 o 30 minutos para que el interior vaya cogiendo calor. Debemos introducir ollas, bandejas o sartenes oscuras, preferiblemente de color negro, ya que así se absorben todas las longitudes de onda del sol. Si no se tienen, la siguiente mejor opción es que sean transparentes y también es muy importante que tengan el fondo plano y sean finos. Al tener el fondo plano hay más superficie en contacto con la placa de la base del horno (que se calienta que no veas) y al ser finos conseguimos que se calienten mucho antes.
Cada vez que abrimos la puerta trasera estamos perdiendo calor. Mi recomendación es que eches todos los ingredientes en la olla (siempre que se pueda) y la metas en el horno lo más centrado posible. Intenta no abrir el horno hasta que no esté lista la comida porque volver a coger temperatura llevará un tiempo. Puede ser muy útil tener un termómetro dentro para controlar la temperatura.
Para evitar mucha condensación podemos tapar la olla o bandeja con una tapa o film transparente.
Trucos
Hay que tener en cuenta que no puedes remover la comida mientras se está haciendo y que si hay salsa, caldo o agua, no va a hervir como cuando la tenemos en la vitro o cocina de gas. Por ello es importante que la sal y especias estén ya disueltas en el agua y no las eches por encima, porque no se van a repartir bien.
Voy a hacer vídeos con recetas para que tengas ideas y controles mejor los tiempos, ya que se puede hacer de todo (excepto freír). Puedes hacer pasta, arroz, verduras, carnes, pescados, pan, pasteles…
Importante fijarse a la hora de abrir el horno para sacar la comida porque puede salir vapor de agua que quema de verdad, igual que en el horno de casa. Utiliza manoplas o trapos para no quemarte y cuidado con la base del horno, que puede estar a más de 100º.

Otros usos
Otro uso interesante de las cocinas solares es como deshidratador de alimentos. Para ello basta con orientar mal el horno o dejar la puerta trasera parcialmente abierta. Así, la temperatura interior no subirá de 50 o 60 grados. Aquí también es interesante el termómetro.
También es útil para hacer yogur gracias al excelente aislamiento térmico que ofrece el corcho. Lo colocamos de tal forma que la temperatura se mantenga en torno a 45º (ya sabes, con puerta abierta y mala orientación) y podemos hacer nuestro yogur casero.
Ventajas y desventajas del SunOK Suntaste
Ventajas
- Diseño y fabricación en Portugal
- Cuerpo de aglomerado de corcho
- Bisagra a prueba de «huracanes»
- Alta eficiencia
- Materiales de muy buena calidad
- Cristal inclinado para eliminar condensación
Desventajas
- Sistema de cierre de la puerta trasera
- El precio no está al alcance de todo el mundo
Comprar el SunOK Suntaste
Si te interesa comprar este horno puedes hacerlo directamente a fábrica. Para ello tienes que escribir a SunOK diciendo que vas de parte de Fray Sulfato y tendrás un 3% de descuento en cualquiera de las 2 versiones del Suntaste (compact o XL). Se hacen envíos también a América, aunque los costes variarán dependiendo del país. Los envíos a España peninsular cuestan 46€ y el precio del Suntaste Compact es de 419€ (IVA incluido) y el del XL es de 499€ (IVA incluido).