Os voy a explicar el curioso caso del bosque de mi pueblo. Un bosque de Quercus pyrenaica totalmente artificial, pero en el que no se ha plantado ni una sola semilla. ¿Cómo es esto? Pues te lo cuento en este artículo, así que sigue leyendo.
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Quercus pyrenaica
El rebollo es un árbol de hoja marcescente (se queda marrón durante todo el invierno sin caer hasta que salen los siguientes brotes), pelosa por ambas caras y con unos lóbulos muy marcados. Aunque puede llegar a medir unos 25 metros, lo más habitual es encontrar ejemplares más pequeños.
Crece en casi toda la península (curiosamente en los pirineos es bastante escaso) y está bastante adaptado al clima mediterráneo (por esa pilosidad de sus hojas). A pesar de ello, no lleva mal las fuertes heladas de las zonas más continentales. Eso sí, le gustan los suelos ácidos, por lo que será complicado verlo en zonas calizas.
Su característica más impresionante te la cuento al final.
La historia de Barruelo

A principios del siglo XIX, en Barruelo de Santullán había 37 vecinos (unos 75 habitantes). Era una aldea de montaña dedicada a la ganadería y a pequeños cultivos (como el lino), pero todo cambió a partir de 1838. En ese año se descubre carbón en la zona y pronto comienza un frenesí minero para extraer todo el mineral posible. La buena calidad de la hulla barruelana y su cercanía a la principal red de ferrocarril que salía de Madrid hacia el norte, convierten a las minas de la cuenca del Rubagón en un objeto de deseo. A mediados de siglo, la empresa más importante del país (Crédito Mobiliario) se hace con ellas e invierte en tecnología para convertirlas en punteras a nivel europeo.
Todo esto implica un crecimiento demográfico gigantesco, ya que llegaba gente de todas partes buscando trabajo en una floreciente industria. Tal es el caso, que en la década de 1880, en Barruelo habitaban más de 5.000 personas, siendo a principios de los 30 del siglo XX en torno a 12.000. Barruelo llegó a ser el pueblo más grande de la provincia de Palencia, solo por detrás de la propia capital palentina.
El uso de la madera

La enorme cantidad de personas que no dejaban de llegar al pueblo, necesitaba vivir en algún sitio, por lo que se empezaron a construir casas a diestro y siniestro. Por este motivo, Barruelo es un caos urbanístico absoluto. Todas las vigas de estas casas se extraían de los bosques de roble de la zona, así como la madera para calentar los hogares. Además, la industria minera devoraba madera sin contemplaciones. La entibación de las galerías y el posteo de los talleres de explotación se hacía con los robles cercanos. A esto hay que sumarle la fabricación de traviesas para el ferrocarril, ya que las minas pertenecían a la mayor empresa ferroviaria del país.
Como puedes imaginar, los bosques de roble albar (Quercus petraea) que rodeaban Barruelo fueron esquilmados por completo. Tenemos fotografías panorámicas del pueblo de principios del siglo XX en las que se puede observar como no había ni un solo árbol en la zona. Gracias al ferrocarril, se podían traer montañas de troncos de pino para abastecer las necesidades mineras, por lo que el impacto de las minas dejaba de ser local.
Un bosque artificial que no ha sido plantado
Como te he comentado, los bosques de roble albar que rodeaban Barruelo desaparecieron debido al descomunal incremento demográfico del valle. Este tipo de roble es el que dominaba la zona, un roble perfectamente adaptado al clima del Norte peninsular. Es habitual que forme bosques mixtos con otros robles o con otras especies y aquí se encontraban rodales de rebollo (Quercus pyrenaica). Este es un roble más mediterráneo, menos adaptado al clima continental de la cuenca del Rubagón, pero actualmente es la especie dominante. ¿Cómo puede ser?

Rebrotes de raíz
Una de las características más impresionantes del rebollo es su capacidad de rebrotar de raíz. De un mismo individuo pueden salir multitud de nuevos pies que van a tratar de colonizar todo el terreno posible. Este comportamiento «invasor» les ayuda a la hora de sobrevivir a los incendios ya que pueden brotar mucho más rápido al tener un sistema radicular establecido. Esto les permite desplazar a las demás especies que tienen que salir desde la semilla ya que son mucho más rápidas. Además, al salir varios pies de una misma raíz, ocupan mucho más espacio y consiguen recibir más luz que el resto.
Digo que es un bosque artificial, porque si el hombre no hubiera talado los bosques de roble albar, no existiría el bosque actual. Además, no ha sido plantado porque su capacidad de rebrote de raíz les ha permitido imponerse al resto al tener un desarrollo mucho más rápido. Al final, a pesar de ser un árbol orientado ligeramente más hacia un clima mediterráneo, ha podido adaptarse perfectamente a nuestra tierra y dominar nuestros bosques.